Ya hoy es Navidad.
Una Navidad triste,
nostálgica, sin ilusiones.
Sin poder contar con aquellos que nos hacen felices.
Una Navidad sin abrazos,
sin canciones.
Sin embargo, hay que pensar
en lo más importante,
en un Niño Jesús
que cada año nace
lleno de amor,
abriéndonos las puertas
de una Navidad
infinitamente mejor,
llena de esperanza y amor.
Sé el primero en comentar